antes publicado en Cinco kilos de vacío Tú, lector o lectora, que sales a la calle constantemente, víctima quizás de la típica fobia al aburrimiento cotidiano, ¿te has percatado alguna vez de ese tipo con el rostro someramente descompuesto, con aires de no saber exactamente
antes publicado en Cinco kilos de vacío Congenio muy bien con los grifos. Me agrada observarlos. Casi siempre hay esa gotita que cae de ellos como si llorasen lánguidamente. Abajo, en el agua estancada, la gotita va a perderse y a fundirse en una líquida
antes publicado en epifanía doméstica de la nostalgia pura Sospecho que lo que compartiré a continuación no es ni será de la incumbencia de nadie, pero es que las cosas curiosas me llaman mucho la atención, y esto lo es, así que por qué no.