El abuelo.
El abuelo solía decir que la tierra era para quien la trabajaba. Que la dignidad, la honradez y la justicia pertenecían a los hombres que viven de su fe.
El abuelo solía mencionar que la única herramienta para el hombre recaía en la voluntad y firmeza de su corazón, el ímpetu de lucha por alcanzar mejores alternativas de vida era lo esencial para todos y todas los trabajadores.
Pese a la desesperanza imperante habrá un futuro prometedor. Un mañana donde todo será mejor.
El abuelo solía mencionar que todo recae en la firmeza del corazón.