El viejo mar
Mi bisabuelo murió en la Cristera después de fusilar a un sacerdote. Frente a diez hombres que miraban sus fusiles máuser, inmóviles al contemplar la Gracia Divina —la Gracia: un hombre perforado por dos descargas del pelotón de fusilamiento, veinte balas 7x57mm, arrodillado y con