Técnicos y rudos.
En el centro del cuadrilátero
El luchador aplica una llave a su contrincante
La gente enardecida
¡Arriba los rudos!
Una victoria
Dos de tres caídas
– Por esta ocasión se salen con la suya –
Dice una anciana bien encabronada
La arena Coliseo
Es testiga de la afición
Ritual dominical
En los vestidores
Rudos y técnicos sin diferencia alguna
Conviven como grandes hermanos.